martes, 16 de enero de 2018

HOJAS MUERTAS




Tras el viento helado, las hojas muertas acarreadas por la inevitabilidad llega irremediablemente la pregunta: ¿qué ha sido de tus anhelos?, ¿donde están ahora?, ¿Han sido perseguidos y  acorralados?, ¿se han extraviado en esa vastedad de la nada adonde acuden tus pensamientos cuando escuchas hablar a personas que no significan nada para tí?, ¿han sido asesinados y desmembrados, metidos en bolsas negras de basura, escurriendo su sangre mientras los arrastras al sótano?.

En el vacío de una habitación a contra luz, el crepúsculo lástima los ojos ciegos de los anhelos frustrados; el aire entra a los pulmones asfixiados y quema, se oye el sonido de la respiración pero no oxigena nada en lo absoluto, sería fácil salir de aquí, llamar a alguien, buscar una voz que calle este ruidoso silencio, jamás lo hago. No quiero salir de mí mismo, sería inútil en todo caso, no podría hacer salir palabras coherentes de mi boca, para mostrar el lugar en que hoy me encuentro, ni siquiera yo lo sé con certeza, es a veces aterrador y confortable al mismo tiempo. Pero ahora solo son pensamientos confusos y difusos, estériles a lo mucho, tan sutiles que no alcanzan a afianzarse en una red mental lo suficientemente fuerte para establecer una cordura, una conversación con la nada.


En brazos débiles me dejo caer, no hay ninguna certidumbre que me sostengan, pero es un acuerdo aceptable, de cierta manera la idea de la caída es digerible cuando se sabe que no hay vuelta atrás, soy solo una sombra más en este atardecer, solo otra hoja arrastrada por el viento del invierno.

miércoles, 10 de enero de 2018

SER UNO EN LA NADA



Aunque odie admitirlo, probablemente por el paso de los años, hoy me siento  más débil, precisamente cuando intento ser más fuerte. Miro alrededor y solo veo que es todo lo que hay para mí, y no me agrada.

La bondad es fuerza, la generosidad es fuerza, la franqueza es fuerza, la compasión es fuerza. Es angustiosamente más fácil levantar un muro, que derribarlo.

Odiar es fácil, es pan comido y vivir en pausa inmerso en frustración es cobarde, son verdades que duelen, y duelen mucho. La auto-creación es dolorosa, tratar de sostenerte sin ninguna cosa por la cual victimizarte es una idea difícil de digerir, sin apoyarse en otra persona, ser la propia fuente de fuerza por la que te sostendrás, sin deberse a nada, ni a nadie.


Ser uno desde el cero. Ser todo a partir de nada.

martes, 9 de enero de 2018

ATHAZAGORAFOBIA



No soy una víctima de mis padres. No soy un esclavo de mi propia versión del  horror. En realidad no necesito de ayuda alguna para envilecerme y sin embargo por alguna razón no exploté, pesé a las predicciones de mis padres y de mis maestros, no terminé preso, ni adicto. Lo hice bien en retrospectiva.

En el trayecto pude expulsar el veneno que invadía mi mente, plenamente consciente de que no necesito a nadie para que me joda la existencia, ya que soy totalmente auto suficiente en ello y a decir verdad logré hacer un buen oficio de eso.

Aunque desconozco a donde va a parar todo esto no me interesa mucho, si bien tengo miedo de trasladar la pesadilla mental en la que me he convertido a alguien más, hoy mi contorno nunca ha sido tan claro, vivir de cierta manera la muerte, la muerte espiritual, la muerte ajena, la muerte cercana; ha despojado la mayoría de las palabras de mi discurso, actualmente para mí, hablar es una enfermedad, la acción es su cura; la muerte en sus distintas formas ha estado presente, abrumadoramente presente conmigo todo el año, ha estado hablando conmigo en la oscuridad de mis sueños, a grado tal que cada amanecer representa mi grito de batalla silenciosa, el agotamiento es mi victoria

Mi medida es la visualización de mi propia muerte, en esta senda no reconozco a ningún compañero o aliado, ni quiero tenerlo,  pero entiendo a la extinción propia o ajena como un maestro y la definición de un poder absoluto, el único tangible y objetivo, en este mundo de percepción. Mi camino es claro y presentado ante mí, el viento me atraviesa, como liviana cortina en un verano caluroso. Sueño con paisajes desérticos vacíos


Y seguir adelante.

NUNCA ESTUVE AHÍ


Ha pasado mucho tiempo desde que no soy yo, tanto que olvidé mi propio rostro, olvidé que tenía una voz que podías escuchar cuando me jurabas cuánto significo para ti y querías saber cómo me siento. Hoy mi silencio escupe en tu cara, no hay forma linda de decirlo y  en realidad no me interesa si te hiere o no, aunque debo confesar que no fue mi intención tirar una piedra en el cristal de tu recuerdo, pero las cosas son lo que son, y a veces las cosas son mejor dejadas rotas y dispersas

Conociéndome debí haber sabido mejor, que es mi costumbre comenzar algo que no pienso terminar.  y que eso no me ha importado jamás, en lo absoluto. Con un demonio!! ni siquiera recuerdo muchas de las cosas que alguna vez comencé, ni siquiera haberlas comenzado jamás, y si, es una postura cómoda para un pecador empedernido, no me disculpo por ello,

No quiero conocerte, no deseo recordarte, ni siquiera recordaré haber rozado tu existencia, y así, pasaras años sin mí, y serás feliz, y luego te desvanecerás por completo; sin que esto tenga algún significado para ti, y mucho menos............... para mí.


Buena suerte.

CRUEL SUAVIDAD



Las personalidades grises, que confunden ideales con sus apetitos, aquellos que  miran su reflejo cada mañana limpiando el vapor de sus espejos, no llegan a comprender que ha sido de ellos, como han llegado a ese punto, a ese lugar donde se extraviaron y fueron ceniza, caminado entre callejones como sombras, sin siquiera líneas marcadas que definan una silueta, sino como manchas de aceite viejas en el concreto, rumiando palabras sin sentido para expresar preguntas incoherentes sin buscar realmente una respuesta, como seres  suficientemente inteligentes como para ser crueles solamente, pegados a pantallas luminosas en todo tipo de dimensiones, estupidez en alta definición, esperando el sagrado momento en que puedan destapar otra lata de cualquier tipo de licor que los haga olvidar, como si tuvieran algo digno de recordar, como si tuvieran algo que pudiera atormentar su alma, como si tuvieran alma. Ni siquiera poseen un dolor que los atormente, no conocen la tristeza, anhelan el gozo pero en realidad jamás lo han experimentado, y ni el dolor y el gozo podrían tocarlos aun y cuando por una extraña experiencia llegaran al umbral de sus patéticas existencias. El sol se oculta sobre la cuesta  otro día, otra ardua faena de autodestrucción progresiva, que increíble hipocresía es lamentarnos por nuestros pecados en contra de nuestros prójimos cuando no somos conscientes de las cosas imperdonables que nos hacemos a nosotros mismos, nuestros peores enemigos.

Me resulta entretenido, a veces me deleita que estas personas me increpan, en sus sutiles modos, llamándome mierda cuando menos, creyendo que me han dicho algo que no he escuchado, algo que no sepa, calificativos endebles, en comparación con lo que me digo a mí mismo cada mañana, jamás podrán aspirar, ni en sus sueños más salvajes a ser tan duros conmigo como yo mismo lo soy

A la mierda con esas sombras

Si me aman o me odian, todo pesa lo mismo en mi balanza de cosas sin relevancia